Penalizan el uso de medicamentos para inducir al aborto, mifepristona y el misoprostol sin la autorización adecuada en el estado de Luisiana, anunció su gobernador Jeff Landry, tras la firma de una nueva ley que clasifica en la que incluye ambas sustancias en una lista de medicamentos peligrosos controlados.

Con esta medida, la posesión de estos medicamentos sin la debida receta médica será castigada con penas de cárcel y multas. La aprobación de esta ley convierte a Luisiana en el primer estado de Estados Unidos en imponer sanciones penales a quienes manejen la mifepristona y el misoprostol sin la debida autorización

La ley, ha generado polémica y debates tanto dentro como fuera del estado, porque busca restringir el acceso a estos medicamentos, argumentando preocupaciones de seguridad y salud pública.

El gobernador Landry, conocido por su postura conservadora en temas sociales, declaró que esta medida es un paso necesario para proteger a las mujeres y garantizar que los medicamentos se utilicen bajo supervisión médica adecuada. “No podemos permitir que estos medicamentos peligrosos circulen libremente sin la debida regulación”, afirmó Landry.

Por otro lado, organizaciones defensoras de los derechos reproductivos han criticado la medida, argumentando que restringe el acceso a opciones seguras y legales para el aborto. La directora de una de estas organizaciones, que prefirió no ser nombrada, expresó su preocupación: “Esta ley no solo penaliza a quienes buscan ejercer su derecho a decidir, sino que también pone en riesgo su salud al empujarlas hacia métodos no regulados y potencialmente peligrosos”.

La ley entrará en vigor a partir del próximo mes, y las autoridades estatales ya están trabajando en la implementación de los mecanismos necesarios para su cumplimiento. Mientras tanto, el debate sobre el acceso al aborto y la regulación de medicamentos continúa intensificándose en todo el país, con Luisiana ahora en el centro de esta controversia.

Los médicos critican que estos medicamentos tienen usos críticos fuera de la atención del aborto, incluida la ayuda en el parto, la prevención de úlceras gastrointestinales y el tratamiento de abortos espontáneos.

Otras de las sustancias de la Lista IV incluyen algunos narcóticos; depresores como Xanax y Valium; relajantes musculares; ayudas para dormir, y estimulantes que pueden usarse para tratar el trastorno por déficit de atención/hiperactividad y la pérdida de peso.

La medida cuenta con el apoyo de grupos antiaborto y el rechazo de profesionales médicos y defensores de los derechos reproductivos.

En contraste, el gobernador de California, el demócrata Gavin Newsom, promulgó una medida que permite temporalmente a los proveedores de abortos de Arizona realizar el procedimiento en el Estado Dorado hasta el 30 de noviembre. (Con información de EFE).