Los residentes de Santa Clara han expresado su preocupación por las intenciones del condado de comprar Monterey/Bernal, un pueblo de casas pequeñas en San José, actualmente utilizado para albergar a personas sin hogar, con la intención de transformarlo en un centro de vivienda para personas que han estado encarceladas, como parte de un programa de desvío de cárceles.

Aunque el plan del condado de Santa Clara tiene el potencial de ofrecer una solución positiva para personas en situación de vulnerabilidad, su éxito dependerá en gran medida de cómo se gestionen las preocupaciones legítimas de la comunidad y de la capacidad de las autoridades para implementar el programa de manera segura y efectiva.

INAUGURADO EN PANDEMIA

Según se pudo conocer, Monterey/Bernal, fue inaugurado en el año 2020 como una solución de emergencia para personas sin hogar durante la pandemia, con servicios de apoyo proporcionados por la organización HomeFirst.

Ahora, los funcionarios de los Servicios de Salud Conductual del condado de Santa Clara, quieren utilizar este espacio para albergar a personas que participan en un programa de desvío de cárceles, una alternativa al encarcelamiento para individuos con problemas de salud mental y conductual.

La propuesta, ha generado en los residentes de los barrios adyacentes legitimas inquietudes sobre la seguridad. El concejal del Distrito 2, Sergio Jiménez, expresó que las dudas de los residentes de la zona se han intensificado debido a la falta de claridad y transparencia en la comunicación del condado con la comunidad.

En una reunión virtual organizada por el condado, los residentes se sintieron insatisfechos con las respuestas de los funcionarios, describiendo el encuentro como tenso y conflictivo.

RETRASAN PROYECTO

La venta del terreno por parte del Ayuntamiento de San José, que es crucial para que el condado pueda llevar a cabo su plan, se ha retrasado para que los líderes de la ciudad puedan evaluar mejor las intenciones del condado y las preocupaciones de la comunidad.

Si la compra se concreta, el condado planea garantizar la seguridad las 24 horas en el sitio y coordinar con las fuerzas del orden para asegurar la protección de los residentes. Además, los actuales ocupantes de las mini casas podrán completar sus programas antes de que los nuevos participantes del programa de desvío ocupen las camas vacías.