Ante el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, a partir de enero de enero del 2025, el estado de California ha tomado medidas preventivas para proteger sus políticas y derechos fundamentales. El gobernador Gavin Newsom durante la sesión especial de la Legislatura asignó un fondo inicial de 25 millones de dólares destinado a litigios legales contra el futuro gobierno republicano.
El fondo será utilizado por el Departamento de Justicia de California y otras agencias estatales con el fin de resistir las posibles “extralimitaciones” de la nueva administración en temas clave como inmigración, cambio climático y aborto.
“Esta sesión especial tiene como propósito preparar a California para el éxito, independientemente de quién esté en la Casa Blanca”, declaró Newsom a través de un comunicado. Aunque expresó su disposición a trabajar con el nuevo gobierno, dejó claro que el estado está listo para defender los derechos y libertades de sus habitantes.
California, que es la quinta economía del mundo y un estado santuario desde 2017, ha mantenido una relación conflictiva con Trump en el pasado, enfrentándose en múltiples demandas relacionadas con la defensa de los indocumentados y la promoción de políticas ambientales. Durante su primer mandato, Trump criticó duramente al estado y amenazó con retener fondos federales para enfrentar incendios forestales, culpando a las autoridades locales por los desastres.
En las últimas semanas, Newsom viajó a Washington para asegurar recursos federales antes del cambio de administración, subrayando su compromiso de proteger a los californianos ante los desafíos venideros. (Con información de EFE)