En un mundo cada vez más conectado, la prevención es una de las herramientas más poderosas para enfrentar el tráfico humano. Hablar abiertamente, compartir información y estar atentos son pasos esenciales para proteger a nuestros hijos y comunidades de este delito que, aunque muchas veces pasa desapercibido, deja cicatrices profundas en quienes lo sufren. 

El tráfico humano no es un problema lejano ni ajeno. Es un delito que explota a personas de diversas maneras: esclavitud laboral, explotación sexual, trabajo forzado o incluso la extracción de órganos. Lo más alarmante es que sucede más cerca de lo que imaginamos, a menudo sin que nadie lo note. 

Las víctimas suelen ser seleccionadas por su vulnerabilidad. Son engañadas con falsas promesas de empleo, educación o una vida mejor, a veces incluso por personas cercanas, como familiares o amigos. Lo que empieza con esperanza, pronto se convierte en una pesadilla. Lamentablemente, los niños son especialmente vulnerables, ya que pueden ser secuestrados o manipulados para integrarse en estas redes de explotación. 

En el marco del mes de concientización sobre la trata de personas, la especialista en salud mental Celia Laguna subrayó lo fundamental que es entender este problema y prevenirlo. 

“La educación y la sensibilización son claves para proteger a quienes están en riesgo. Además, es crucial que las víctimas sepan que tienen derechos y que existen recursos para ayudarlas. Debemos priorizar el bienestar y la dignidad de cada individuo en esta lucha”, comentó Laguna. 

Cómo podemos prevenir el tráfico humano

La prevención comienza en casa, con conversaciones abiertas y sinceras. Los padres deben hablar con sus hijos sobre los riesgos, especialmente en esta era digital, donde las redes sociales pueden ser un terreno fértil para quienes buscan explotar a otros. 

“Es importante enseñarles a nuestros jóvenes que no todas las oportunidades que parecen perfectas son reales. Si algo suena demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea,” explicó Laguna. 

En el programa radial “Alianza contra la Violencia Doméstica”, la periodista Rossana Drumont y Celia Laguna compartieron historias impactantes de jóvenes que fueron engañados con ofertas de trabajo o estudio y terminaron atrapados en redes de explotación. 

Laguna también hizo un llamado a los padres para que estén siempre atentos a sus hijos, incluso en actividades cotidianas. “Dejar que los niños se alejen o se distraigan en lugares públicos puede ponerlos en riesgo. La negligencia, aunque no sea intencional, puede tener consecuencias devastadoras. Es crucial enseñarles a no hablar con extraños, ya sea en persona o a través de dispositivos electrónicos”. 

Recursos y apoyo para protegernos juntos 

En este tema, todos podemos hacer algo. Informarnos, hablar con nuestros hijos y mantenernos alerta son pasos que marcan la diferencia. Además, es esencial conocer los recursos disponibles: 

– Línea nacional contra la trata de personas: 1-888-373-7888 

– Participación en actividades de concientización durante enero, el Mes Nacional de la Prevención de la Trata de Personas en EE.UU. 

– Uso del color azul como símbolo de apoyo a las víctimas y de rechazo a este delito. 

En California, las cifras nos recuerdan la magnitud del problema: en 2023, se reportaron 28,000 niños desaparecidos, y este número se duplicó en 2024. Estos datos refuerzan la importancia de mantenernos vigilantes y trabajar unidos para proteger a nuestras familias y comunidades. 

La especialista Celia Laguna concluyó con un mensaje esperanzador: “La prevención empieza en casa. Cuando educamos, escuchamos y actuamos, creamos un entorno más seguro para nuestros hijos y ayudamos a erradicar este terrible delito. El cambio está en nuestras manos”.

Este artículo es parte del proyecto periodístico sobre la Violencia Doméstica en la comunidad latina y cuenta con el apoyo y generosidad de Blue Shield of California Foundation.